Stormbreaker

Stormbreaker - Anthony Horowitz *PUEDE CONTENER SPOILERS*

Publicado primero en el "blog" Fuerza, Locura y Libertad

La historia comienza cuando Alex Rider, de 14 años, despierta en el momento que oficiales policiales llegan a su casa a informar del fallecimiento de su tío durante un accidente automovilístico. Le dicen que un auto lo envistió en una rotonda -prácticamente en el medio de la nada- y que su muerte fue instantánea, dado que su tío no llevaba el cinturón de seguridad puesto. Esto a Alex le parece extremadamente extraño, dado que Ian Rider era muy cuidadoso con esas cosas.
Otros pequeños hechos van sucediendo que Alex encuentra extraños. Durante el funeral, mientras él está con Jack -la ama de casa-, se presentan el director y un par de hombres del banco Royal & General en donde su tío trabajaba como encargado de Finanzas Internacionales. Lo raro que notó Alex, es que estos hombres portaban armas. ¿Por qué unos simples banqueros portarían armas, verdad? Luego, cuando regresaban a su casa, Jack y él se percataron que había un camión de mudanzas saliendo de la casa de su tío. Demasiadas cosas inusuales llevan a Alex a necesitar una prueba visual de su tío realmente falleció en un accidente automovilístico. Por lo que va al desguazadero y allí se lleva la sorpresa de encontrar el auto de su tío, sí, pero no abollado o dañado como debería estar luego de colisionar con otro coche. No, lo que encuentra son agujeros de bala en el parabrisas. En ese momento, tiene la certeza de que Ian fue asesinado. Si bien ahí tiene su primera experiencia cercana a la muerte, su verdadera aventura comienza cuando al otro día lo llaman del banco para hablar del testamento de su tío. Al colarse en la que era la oficina de Rider, y hurgar en sus cajones, se da cuenta que los archivos guardados no son para nada de negocios bancarios; un archivo en particular le llama la atención; éste es llamado Stormbreaker. Pero antes de que pueda indagar más, los socios del banco entran a la oficina y le disparan con algún tipo de dardo, dejándolo inconsciente.
Al despertar, se reúne con el Director del "banco", Alan Blunt, y su mano derecha, la Sra. Jones. En ese momento la verdad es revelada: su tío era un agente secreto del MI6 (el Servicio de Inteligencia Secreto Británico) y que fue asesinado cuando regresaba de una misión en la que su objetivo era observar y descubrir qué se traía entre manos Herod Sayle con sus dispositivos informáticos, los Stormbreaker. Y han reclutado a Alex -más o menos por medio de chantaje luego de que él se negara- para hacerse pasar por Félix, un chico que ganó un concurso informático en el que el premio es visitar las instalaciones de Sayles Enterprises y ser el primer niño en probar el Stormbreaker. La misión de Alex es continuar la investigación donde la dejó su tío e informar lo que descubra al MI6.
Alex Rider es un chico muy talentoso: habla tres idiomas, es cinturón negro en karate, sabe manejar, sabe hacer alpinismo, etc. Se ve que su tío, consciente o inconscientemente lo ha estado entrenando durante toda su vida. Pero a pesar de esas habilidades, Blunt y Jones los envían al centro de entrenamiento del SAS, para tener la formación "básica" de un espía.

"Recuerda siempre, Alex Rider, que nunca se es demasiado joven para morir."


Cuando llega a las instalaciones de SE, Alex parece encontrar todo normal, hasta que de a poco va encontrando pistas que ha dejado su tío. (Debo decir que esas partes se me hacían medias incómodas, porque el narrador -que es omnisciente- está todo el tiempo como: "otra vez, lo salvó el muerto", o "las pistas del muerto lo dirigieron a su propia tumba", etc). Todas las situaciones que Alex vive durante su estadía en Port Tallon, te tiene sentada al borde de la silla. Como en un estado de adrenalina pura, a la espera de que caiga el otro zapato. Es impresionante ver lo astuto que tiene que ser para no ser descubierto, para tomar decisiones de vida o muerte en los últimos segundos, para poder investigar sin levantar sospechas. Hasta que, llegado a un punto en el que él comienza a cambiar de parecer con respecto al "villano" -podríamos decir- de esta historia, descubre la verdad:

"El multimillonario estaba completamente loco. Lo que estaba planeando se encontraba más allá de lo creíble."


Alex, a partir de ahí, debe comenzar una carrera a contrarreloj para poder salvar a millones de niños de una muerte segura. Situaciones extremas rozando la muerte, la balanza y el tiempo en su contra, y un encuentro con el asesino de su tío, son algunas de las cosas que éste chico de catorce años debe enfrentar en esta historia.


Ahora, si bien la historia me gustó bastante, y sentía que en cualquier momento iba a darme una ataque al corazón; la forma en que está narrado el libro me dificultó el conectar con los personajes, aún sabiendo todo lo que pensaban, sentían, veían. A pesar de ello, tiene una trama muy interesante, la lectura es fluida, todo es muy detallado y está perfectamente explicado.
Si bien no fue "OHHH, EL LIBRO" que me matara, me gustó bastante como para leer el resto (o por lo menos el siguiente) de la saga.